No obstante la conocida crisis económica que sacudió a la
nación en 1890, el comienzo de esa década marca un avance definitivo del progreso
para las principales urbes de nuestro país. En semejante contexto, Rosario ya
estaba posicionada como la segunda ciudad argentina en términos de población, comercio
e industria. Apogeo del fenómeno
inmigratorio mediante, la gran metrópolis portuaria del Paraná competía con Buenos
Aires en cantidad, calidad y envergadura de bancos, fábricas, hoteles, tiendas y estaciones ferroviarias (1). La manufactura tabacalera, muy próspera en la
época, no era una excepción a este desarrollo. Numerosas factorías y talleres
producían entonces diferentes artículos del fumar que luego eran comercializados
al detalle en los no menos cuantiosos locales de cigarrerías, almacenes, bares
y demás comercios relacionados.
Aunque la producción rosarina de cigarrillos y puros data de mucho antes, todo indica que el establecimiento La Suiza, de la empresa Testoni,
Chiesa & Compañía, fundado en 1890, fue el primero que sumó a esas
elaboraciones tradicionales la confección de los cigarros llamados italianos, es decir, los del tipo
Cavour, Brissago y Toscano, que constituían el furor de ventas hacia fines del
siglo XIX. Desde su planta de la calle Urquiza 1052, a pocas cuadras del
célebre Monumento a la Bandera (2), la firma de marras logró posicionarse
rápidamente en el mercado santafecino y también en la misma Capital Federal, al
punto de establecer un amplio local propio sobre la Avenida de Mayo 646 (3). Un informe del año 1895 describe la
importancia del emprendimiento que “ocupa
un área de 3000 m2, sin contar la sección aserradero”, señalando lo
siguiente: “200 a 250 operarios, que
representan otras tantas familias, ganan allí su sustento, de las cuales 150
son mujeres”.
La parte técnica enumera ciertos aspectos muy
característicos de las fábricas que producían puros de acervo itálico, como una estufa de piedra importada de Suiza con capacidad para 30.000 cigarros. Pero el
detalle que más nos interesa resulta bien esclarecido cuando se relata que “pasamos enseguida al espacioso local donde
se elaboran los cigarros italianos. Vimos 25 mesas ocupadas por 200 obreros…” El catálogo de productos fabricados estaba
formado en ese entonces, textualmente, por “cigarros
de paja uso Viena, cavours, cigarros pluma, marca Falstoff, Barletta, toscanos,
Indianas, La Luz, Ondinas, Chiaravalli, Montegeneroso, Damitas, trabucos,
perales y muchas otras clases”. En la lista antedicha conviven, obviamente, tipos de productos con marcas comerciales, la mayoría completamente
desaparecidas en la bruma del tiempo. El repertorio de tabacos estibados es
igualmente variopinto, pero refleja perfectamente la diversidad de materias
primas que se utilizaba en aquellos años: “vimos
estibas de dos a tres mil fardos de tabaco correntino, paraguayo, salteño,
tucumano, Virginia, Bahía, Río Grande y otras clases” (4).
La Suiza de Testoni & Chiesa continuó su vida en las
manos fundadoras hasta 1911, cuando fue adquirida por un conglomerado
tabacalero de origen inglés (luego absorbido, a su vez, por la firma Piccardo).
En esos años supo lanzar al mercado diferentes rótulos que llegaron a ser muy
populares, como los cigarrillos Mauser Argentino, Monterrey y Vencedor, así como el tabaco Cerro Corá. También tuvo sus tropiezos comerciales
y legales, como cierta oportunidad en que debió enfrentar un juicio por falsificación
e imitación de marcas, y precisamente de toscanos (5). Pero igual vale la pena
recordar a este portento de la industria nacional, el primero que puso su pie en la cuna de la Bandera Patria con el fin de producir el cigarro puro más popular
de nuestro país durante cien años.
Notas:
(1) Entre 1910 y 1950, la ciudad de Rosario llegó a contar
con cinco terminales ferroviarias de pasajeros funcionando en forma simultánea,
pertenecientes a distintas empresas de capital privado. Ellas eran Rosario Central (FCCA), Rosario del Santa Fe (FCSF), Rosario Central Córdoba (FCCC), Rosario del Compañía General (FCCGBA) y Rosario RPB (FCRPB). Por ese entonces,
sólo Buenos Aires (que tenía siete) la superaba. Con la nacionalización de 1949 se hizo evidente que tan compleja nomenclatura podía unificarse por trochas, y las cinco estaciones
terminales pasaron a ser dos, una para trocha ancha y otra para trocha angosta.
Actualmente ninguna de las mencionadas se encuentra operativa, aunque todas
están en pie cumpliendo diferentes servicios: Rosario Central es un complejo cultural y recreativo, Rosario del Santa Fe es la terminal de
ómnibus, Rosario Central Córdoba no tiene un destino específico, aunque es
protegida por entidades de preservación ferroviaria, Rosario del Compañía General es
un destacamento de Gendarmería Nacional, y Rosario
RPB se encuentra dentro de un campus universitario. La siguiente es una
foto actual, tan hermosa como lúgubre y desolada, de la estación Rosario Central
Córdoba lado andén.
(2) En el texto de la reseña aparece el domicilio como
Urquiza 252. Por lo visto hubo un cambio posterior de numeración (algo muy
común en muchas ciudades del país entre 1890 y 1900), tras el cual pasó a ser
1052.
(3) Físicamente hablando, el recinto de la filial porteña existe
aún en su edificio primigenio, pero por cierta ironía histórica se ubica allí
una sucursal de Mc Donald’s.
(4) Durante el período que podríamos llamar fundacional del
toscano manufacturado por la industria argentina (1880 a 1920), los tipos de
tabaco empleados para su producción eran mayormente tucumano (en el relleno) y
Virginia (en la capa).
(5) Sobre ese tema hicimos una entrada en el blog Consumos
del Ayer: http://consumosdelayer.blogspot.com.ar/2012/12/cigarros-en-tela-de-juicio.html
La ironía es doble, en el primer edificio utilizado en Buenos Aires por Testoni & Chiesa hay una sucursal de Mc Donald´s. Luego se mudaron a la esquina de Corrientes y Florida, al que originalmente fuera el Palacio Elortondo Alvear y en la actualidad es una sucursal de Burger King. Pareciera que las hamburguesas los persiguen...
ResponderEliminarSe pueden apreciar en este enlace las figuritas que acompañaban a los cigarrillos Monterrey: http://www.figuritasdefutbol.com.ar/coleccion-cigarrillos-monterrey-1911/
Saludos